El terremoto del martes 19 de septiembre de 2017 causó daños severos a la infraestructura de las viviendas y edificios en la Ciudad de México. Edificada sobre sedimentos blandos originados por los antiguos lagos debajo, estos amplifican las ondas sísmicas hasta 50 veces la fuerza original y otorgan a la Ciudad una situación casi única en este sentido.
Es importante no olvidar lo ocurrido, no hay duda de esto, pero es más importante aún adoptar las enseñanzas que nos puede brindar una tragedia como ésta, identificando los puntos fundamentales que pueden preparar mejor a la ciudad, y el país, en un futuro:
- Actualmente, un sismo fuerte afecta mucho a los edificios que están sobre el antiguo lago de Texcoco, debido a que el suelo es más inestable que en otras zonas. Debemos aspirar a tener un solo estándar de seguridad para todos los inmuebles.
- La desconfianza en las autoridades e instituciones encargadas de la reconstrucción del país debe contrarrestarse con la toma de decisiones contundentes y lógicas ante la situación en la ciudad; de forma que contribuyan a su recuperación. Por el momento han anunciado la demolición de 24 edificios en la CDMX; sin embargo, el diario Reforma asegura que los terremotos de septiembre (del 19 y del 7 de septiembre) causaron daños en más de 120,000 edificios; de esos, al menos 50,000 inmuebles están en situación de pérdida total y deberían ser demolidos.
- Buscar contar con tecnología avanzada para rescatar a víctimas de terremotos. Los equipos de tecnología que ayudaron a encontrar personas vivas en los edificios colapsados fueron traídos principalmente de Japón e Israel.
- Según Alfredo Sandoval, científico de la Universidad Iberoamericana, con la certificación anti sísmica vigente, ningún edificio en la capital debió haber sufrido daños en su estructura. ¿Por qué estaban estos edificios en pie? En momentos así es cuando se evidencia el alto costo que tiene la corrupción en México.
- Por último, debemos considerar y cuestionar las normas de urbanización en la Ciudad de México. Sin lugar a dudas es clave observar y analizar a quienes desarrollan la construcción -en tiempos muy rápidos- de los grandes edificios de la capital.
En las últimas semanas hemos sido testigos de las terribles consecuencias de los sismos #19S y #7S; pero debemos tener en cuenta que es una gran oportunidad para generar la reconstrucción no sólo material, sino social del país. México no sólo saldrá adelante de esta situación, saldrá fortalecido.
